EMELEC TRICAMPEÓN

Emelec jugó el partido perfecto para alcanzar el tricampeonato nacional al empatar sin goles con Liga de Quito en el estadio “Casa Blanca”, luego de cuatro días de haber conseguido una victoria de “local” por 3-1.

El técnico Omar De Felippe no solo supo escoger las piezas para encarar este partido y mantener la ventaja lograda en Portoviejo, sino también hacer que se muevan como quería, haciendo un juego inteligente en donde la actitud, la personalidad, la jerarquía, el orden y el buen fútbol, fueron entre otras, las claves para conseguir el resultado que se necesitaba para alcanzar la corona 13 y el primer tricampeonato en la historia de la institución.

Y vale la pena destacar, no solo el trabajo de este equipo que volvió a ser solidario, sino las individualidades, una por una, empezando por su técnico De Felippe, un estratega que supo mostrar su categoría, personalidad y hasta la tranquilidad necesarias para encarar los momentos más complicados y nunca dejó caer al equipo pese a la adversidad; además de su conocimiento técnico, táctico y estratégico para ganar partidos.

Y qué decir del golero Esteban Dreer, que si bien ha tenido un gran año y muestra regularidad en los partidos que juega, en las finales saca la jerarquía necesaria para ganar títulos. Descolgó un par de cabezazos y dio seguridad a una defensa que se rompió ante la avalancha, por momentos sin orden, que fue Liga; además de haber atajado un penal decisivo en el cotejo de ida en Portoviejo.

En el bloque defensivo fue brillante la labor, tanto como línea de zagueros como de manera individual… El año anterior ya lo habían sido los cuatro, John Narváez, Jorge Guagua, Gabriel Achilier y Óscar Baguí… En este la experiencia adquirida pudo más que el deseo de los atacantes “albos”… Narváez, pese a su vértigo y por momentos apresuramientos, cuando tiene que mostrar jerarquía lo hace, prácticamente no dejó que Morales realice su trabajo. La dupla Guagua – Achilier, casi sin errores y mostrando un entendimiento destacable; además de carácter y fútbol… Y qué decir de Óscar Bagui, a sus 30 y más años, corriendo como un juvenil, metiendo pierna y siendo salida constante por el costado izquierdo…

En el mediocampo la dupla que terminaron haciendo Pedro Quiñónez y Fernando Gaibor es para el aplauso… La experiencia y el presente… Dos volantes mixtos que no solo se dan tiempo para marcar sino también para generar fútbol.. Luego viene Fernando Giménez, un reloj por el costado izquierdo, de ida y vuelta y atrevido para pisar el área cuando tiene que hacerlo… Por la derecha uno de los jugadores más desequilibrantes del campeonato, que sabe cuándo y cómo amarrar el partido, Marcos Mondaini… Después viene la dupla en ataque más difícil de frenar, Ángel Mena y Miller Bolaños, marcaron goles decisivos y fueron desequilibrio constante y le dieron a Emelec goles importantes para ir armando el camino que llevó al equipo de De Felippe al tricampeonato… A ellos se suman otros que cuando fueron utilizados respondieron, casos Pinillo, Mina, Charcopa, Herrera, Rolón, Escalada, Klimovic, Arana, José Luis Quiñónez, Corozo, Angulo, Jaime, Noboa y todos los juveniles que fueron utilizados, entre otros.

Un párrafo aparte para quienes no están en la cancha, pero desde afuera son los responsables de hacer de esta institución la mejor del país, la dirigencia… A la cabeza Nassib Neme Antón, sin duda el mejor directivo del fútbol ecuatoriano…

Emelec alcanza su corona número 13 y su primer tricampeonato, con sobra de mefrecimientos… ¡Salud tricampeones!